Una pregunta interesante. En general los motivos para que se establezca para una celebración un rango u otro hay que buscarlos en la historia de esa celebración y pueden ser confuso, pero en este caso parece bastante claro: el nacimiento del Bautista es parte de la narración evangélica; es, por tanto, un acontecimiento con un carácter salvífico evidente, mientras que el nacimiento de la Virgen es una celebración "deducida": si vivió, nació.
Por otro lado, en la última reforma de la liturgia se tendió a evitar que quedaran equiparadas las tradiciones provenientes de la literatura apócrifa, paraevangélica en general, a lo que proviene directamente de los Evangelios; y el nacimiento de la Virgen tiene su fuente en el Protoevangelio de Santiago.
La historia de estas celebracuiones, además, es distinta en un caso y otro: mientras que de la celebración del nacimiento del Bautista tenemos constancia fehaciente de que se realizaba en el siglo V (y posiblemente antes), la del nacimiento de la Virgen recién comienza en Occidente a fines del siglo VII, por imitación de la del Bautista, y para completar un "ciclo" de celebraciones de la Virgen (nacimiento, presentación, anunciación, dormición). ver más detalles sobre esto último en el artículo de Butler sobre el nacimiento de la Virgen, en el santoral del 8 de septiembre.