Inicio
†
(se hace la señal de la cruz mientras se dice:)
V/. -Dios mío, ven en mi auxilio.
R/. -Señor, date prisa en socorrerme.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya
Himno
Verbo de Dios, eterna luz divina,
fuente eternal de toda verdad pura,
gloria de Dios que el cosmos ilumina,
antorcha toda luz en noche oscura.
Palabra eternamente pronunciada
en la mente del Padre sin principio,
que en el tiempo a los hombres nos fue dada,
de la Virgen María, hecha Hijo.
Las tinieblas de muerte y de pecado
en que yacía el hombre, así vencido,
su verdad y su luz han disipado,
con su vida y su muerte ha redimido.
No dejéis de brillar, faros divinos,
con destellos de luz que Dios envía,
proclamad la verdad en los caminos
de los hombres y pueblos, sed su guía. Amén.
Primer Salmo
Salmo 136: Junto a los canales de Babilonia
Ant: Cantadnos un cantar de Sión. Aleluya.
este desierto y esclavitud material hay que tomarlo como símbolo de la esclavitud espiritual (S. Hilario)
Junto a los canales de Babilonia
nos sentamos a llorar con nostalgia de Sión;
en los sauces de sus orillas
colgábamos nuestras cítaras.
Allí los que nos deportaron
nos invitaban a cantar;
nuestros opresores, a divertirlos:
"Cantadnos un cantar de Sión."
¡Cómo cantar un cántico del Señor
en tierra extranjera!
Si me olvido de ti, Jerusalén,
que se me paralice la mano derecha;
que se me pegue la lengua al paladar
si no me acuerdo de ti,
si no pongo a Jerusalén
en la cumbre de mis alegrías.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
Ant: Cantadnos un cantar de Sión. Aleluya.
Segundo Salmo
Salmo 137: Acción de gracias
Ant: En medio de los peligros me conservaste la vida. Aleluya.
Los reyes de la tierra llevarán a la ciudad santa su esplendor (cf. Ap 21,24)
Te doy gracias, Señor, de todo corazón;
delante de los ángeles tañeré para ti,
me postraré hacia tu santuario,
daré gracias a tu nombre:
por tu misericordia y tu lealtad,
porque tu promesa supera a tu fama;
cuando te invoqué, me escuchaste,
acreciste el valor de mi alma.
Que te den gracias, Señor, los reyes de la tierra,
al escuchar el oráculo de tu boca;
canten los caminos del Señor,
porque la gloria del Señor es grande.
El Señor es sublime, se fija en el humilde,
y de lejos conoce al soberbio.
Cuando camino entre peligros,
me conservas la vida;
extiendes tu brazo contra la ira de mi enemigo,
y tu derecha me salva.
El Señor completará sus favores conmigo:
Señor, tu misericordia es eterna,
no abandones la obra de tus manos.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
Ant: En medio de los peligros me conservaste la vida. Aleluya.
Cántico NT
Apocalipsis 4,11;5,9.10.12: Himno de los redimidos
Ant: Tuyos son, Señor, la grandeza y el poder, la gloria y el esplendor. Aleluya.
Eres digno, Señor, Dios nuestro,
de recibir la gloria, el honor y el poder,
porque tú has creado el universo;
porque por tu voluntad lo que no existía fue creado.
Eres digno de tomar el libro y abrir sus sellos,
porque fuiste degollado
y con tu sangre compraste para Dios
hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación;
y has hecho de ellos para nuestro Dios
un reino de sacerdotes,
y reinan sobre la tierra.
Digno es el Cordero degollado
de recibir el poder, la riqueza, la sabiduría,
la fuerza, el honor, la gloria y la alabanza.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
Ant: Tuyos son, Señor, la grandeza y el poder, la gloria y el esplendor. Aleluya.
Lectura Bíblica
Lectura de la carta del apóstol Santiago
St 3,17-18
La sabiduría que viene de arriba ante todo es pura, y, además, es amante de la paz, comprensiva, dócil, llena de misericordia y buenas obras, constante, sincera. Los que procuran la paz están sembrando la paz, y su fruto es la justicia.
Cántico Evangélico
Ant: Oh doctor admirable, luz de la Iglesia santa, bienaventurado N., fiel cumplidor de la ley, ruega por nosotros al Hijo de Dios. Aleluya.
†
(se hace la señal de la cruz mientras se comienza a recitar)
Proclama mi alma la grandeza del Señor,
se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;
porque ha mirado la humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:
su nombre es santo,
y su misericordia llega a sus fieles
de generación en generación.
Él hace proezas con su brazo:
dispersa a los soberbios de corazón,
derriba del trono a los poderosos
y enaltece a los humildes,
a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo,
acordándose de la misericordia
-como lo había prometido a nuestros padres-
en favor de Abrahán y su descendencia por siempre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
†
(se hace la señal de la cruz mientras se comienza a recitar)
Magníficat ánima mea Dóminum,
et exsultávit spíritus meus in Deo salvatóre meo,
quia respéxit humilitátem ancíllæ suæ.
Ecce enim ex hoc beátam me dicent omnes generationes,
quia fecit mihi magna, qui potens est,
et sanctum nomen eius,
et misericórdia eius in progénies et progénies
timéntibus eum.
Fecit poténtiam in bráchio suo,
dispérsit supérbos mente cordis sui;
depósuit poténtes de sede
et exaltávit húmiles;
esuriéntes implévit bonis
et dívites dimísit inánes.
Suscépit Israel púerum suum,
recordátus misericórdiæ,
sicut locútus est ad patres nostros,
Abraham et sémini eius in sæcula.
Glória Patri, et Fílio, et Spirítui Sancto.
Sicut erat in princípio, et nunc et semper,
et in sæcula sæculórum. Amen.
Ant: Oh doctor admirable, luz de la Iglesia santa, bienaventurado N., fiel cumplidor de la ley, ruega por nosotros al Hijo de Dios. Aleluya.
Preces
Glorifiquemos a Cristo, constituido pontífice a favor de los hombres, en lo que se refiere a Dios, y supliquémosle humildemente, diciendo:
Salva a tu pueblo, Señor
- - Tú que por medio de pastores santos y eximios, has hecho resplandecer de modo admirable a tu Iglesia,
haz que los cristianos se alegren siempre de ese resplandor
- - Tú que, cuando los santos pastores te suplicaban, como Moisés, perdonaste los pecados del pueblo,
santifica por su intercesión a tu Iglesia con una purificación continua
- - Tú que en medio de los fieles consagraste a los santos pastores y por tu Espíritu los dirigiste,
llena del Espíritu Santo a todos los que rigen a tu pueblo
- - Tú que fuiste el lote y la heredad de los santos pastores,
no permitas que ninguno de los que fueron adquiridos por tu sangre esté alejado de ti
- - Tú que, por medio de los pastores de la Iglesia, das la vida eterna a tus ovejas para que nadie las arrebate de tu mano,
salva a los difuntos por quienes entregaste tu vida.
Se pueden añadir algunas intenciones libres.
- (Por la Evangelización) Por la fe de los jóvenes. Recemos para que los jóvenes, llamados a una vida plena, descubran en María el estilo de la escucha, la profundidad del discernimiento, la valentía de la fe y la dedicación al servicio.
Anónimo: Bendito niño Jesús en este mes de tu dulce espera concédeme el milagro de que mi amor vuelva a ver
Que su agudeza visual esté intacta cuando se reabsorba la hemorragia y se desinflame su ojo en ti confío amén
Hugo Osvaldo Díaz Rodrígu: Pido aquellas gracias y milagros q más necesito y mi familia
Anónimo: Señor Jesús, ayúdanos a encontrar casa, y a resolver nuestros problemas económicos. Ayúdanos a confiar en Ti. Que se haga tu Voluntad.
OGV y F: Oh vendita virgen en tu divina providencia y virgen de la medalla milagros concédenos tu luz soberana en nuestros proyectos familiares. Dígnate conservar y aumentar la fe y el amor que te tenemos en el nombre de Jesucristo nuestro señor. Amen
OGV y F: Oh vendita virgen en tu divina providencia y virgen de la medalla milagros concédenos tu luz soberana en nuestros proyectos familiares. Dígnate conservar y aumentar la fe y el amor que te tenemos en el nombre de Jesucristo nuestro señor. Amen
Todos juntos, en familia, repitamos las palabras que nos enseñó Jesús y oremos al Padre, diciendo:
Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
No nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Final
Oh Dios, que hiciste de san Juan de Ávila un maestro ejemplar para tu pueblo por la santidad de su vida y por su celo apostólico, haz que también en nuestros días crezca la Iglesia en santidad por el celo ejemplar de tus ministros. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
Si el que preside no es un ministro ordenado, o en el rezo individual:
†
(se hace la señal de la cruz mientras se dice:)
V/. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R/. Amén.
Si el que preside es un ministro ordenado, utiliza una de estas dos fórmulas finales:
(Fórmula larga)
V/. El Señor esté con vosotros.
R/. Y con tu espíritu.
V/. La paz de Dios, que sobrepasa todo juicio, custodie vuestros corazones y vuestros pensamientos en el conocimiento y el amor de Dios y de su Hijo Jesucristo, nuestro Señor.
R/. Amén.
V/. Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo † y Espíritu Santo, descienda sobre vosotros.
R/. Amén.
(Fórmula breve)
V/. El Señor esté con vosotros.
R/. Y con tu espíritu.
V/. La bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo † y Espíritu Santo, descienda sobre vosotros.
R/. Amén.
Si se despide a la asamblea se añade:
V/. Podéis ir en paz.
R/. Demos gracias a Dios.